La medición de la huella de carbono permite conocer el volumen de Gases de Efecto Invernadero – GEI, producidos en mayor o menor escala en las actividades humanas. Esto adquiere importancia a medida que promovemos acciones contundentes para reducirla al máximo y hacer una contribución positiva al planeta.
Con el liderazgo del Centro de Investigación de la Caña de Azúcar – Cenicaña, se han desarrollado desde 2012 las bases metodológicas para calcular la huella de carbono de la producción de azúcar y etanol. El objetivo fue establecer la línea base de las emisiones de GEI en el sector sucroalcoholero colombiano e identificar los puntos críticos que más influyen en estas emisiones.
Se ha estimado la huella de carbono de la producción de azúcar, etanol y energía eléctrica, definiendo como límites del sistema las etapas desde la siembra de la caña hasta la entrega de los productos en la puerta de la fábrica.
La Calculadora de Carbono ha sido la herramienta que permitió realizar las mediciones que abarcaban los procesos de campo, cosecha, fábrica, destilería, calderas, cogeneración, tratamiento de residuos y otras emisiones.
Los resultados de estas emisiones de GEI muestran 22.3 kg de CO2eq por tonelada de caña cuando el único combustible utilizado en la planta de cogeneración es el bagazo.
Los resultados de estas emisiones de GEI muestran 22.3 kg de CO2eq por tonelada de caña cuando el único combustible utilizado en la planta de cogeneración es el bagazo.
Las etapas de mayor contribución a las emisiones totales son campo y cosecha, con 14 y 7 kg de CO2eq por tonelada de caña respectivamente. Estas etapas incluyen la preparación de los terrenos, la siembra de la caña, la aplicación de insumos, la cosecha, el transporte y la entrega de la caña a la fábrica.
ACCIONES QUE NOS PERMITEN SER AMIGABLES CON EL PLANETA
Comprendida la dinámica de la medición de la huella de carbono, se han planteado estrategias contundentes, como el Programa INTEGRA, creado en 2016 por PROCAÑA y sus aliados. En la actualidad, este programa es liderado por Cenicaña y ofrece a los productores de caña la posibilidad de adoptar prácticas visibles, probadas y comprobadas para la reducción de la huella de carbono. Algunas de las acciones aplicadas incluyen:
- La reconstrucción de los diseños de campo, considerando la mejor opción para la operación del riego, el cultivo y la cosecha.
- El uso eficiente del agua en la conducción y riego (mediante tubería por ventanas, pivotes y goteo).
- La utilización de residuos como material de cobertura en todas las calles, promoviendo la Agricultura de Precisión.
- La reducción del consumo de agua mediante mecanismos de riego más eficientes que permiten un menor consumo de combustible.
- La adopción de maquinaria agrícola con tecnología avanzada (GPS), que mejora la calidad y eficiencia de las labores, reduciendo el consumo de combustible por kilómetro recorrido.
- La eliminación de las quemas gracias a la cosecha mecánica, lo que reduce la emisión de CO2 y aumenta el contenido de material orgánico para recuperar la capacidad productiva del suelo, disminuyendo el uso de nitrógeno de síntesis química.
- La siembra de corredores biológicos con diversas especies y distintos portes, que tienen un efecto beneficioso en la protección contra el viento, el aumento de la biodiversidad para el control biológico y la protección de los circuitos de combustión de agua.
PROCAÑA está comprometida con la sostenibilidad y la reducción de la huella de carbono en la producción de caña de azúcar. Sus esfuerzos y resultados positivos demuestran que es posible combinar la producción agrícola con la protección del medio ambiente.
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